Coffee Master 2022: “Las familias multi especie y la importancia de darles la bienvenida en nuestros negocios”.

16 September, 2022

Juan Diego Valdés. Socio principal, Derecho Animal Valdés Abogados ASLABOR.

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El pasado 24 de agosto estuvimos presentes en el Coffee Master 2022, participando de la agenda académica planeada como parte del evento, con una charla titulada “Las familias multi especie y la importancia de darles la bienvenida en nuestros negocios”.

Dimos apertura a nuestra charla, preguntándole a los asistentes al evento si ellos ingresarían o acudirían a un establecimiento de comercio en el que no es permitida la entrada de sus familiares, y donde estos deben esperar fuera. ¿Por qué hicimos esta pregunta? Precisamente porque el concepto de familia multi especie ha ido tomando fuerza, al punto que incluso a nivel judicial se ha hecho referencia a este concepto, que se refiere, como su nombre lo indica, a familias que están compuestas por miembros de distintas especies, como seres humanos, perros y/o gatos, por poner los ejemplos más comunes. En ese orden de ideas, consideramos que es muy probable que una persona que considera a un animal como parte de su familia no vaya o decida no entrar a un espacio (restaurante, café, establecimiento de comercio) al que no pueda entrar con su familiar no humano.

Para explicar un poco mejor este concepto, hicimos una breve exposición del fenómeno de la “descosificación” de los animales, pues, consideramos, ha sido el que ha dado origen a que lleguemos a la consideración de los animales como miembros propiamente dichos de una familia. En ese sentido, señalamos que la descosificación hace referencia, como puede inferirse, a dejar de entender a los animales como simples cosas u objetos, y llevó, inicialmente, a que se les entendiera como “no cosas” es decir, a que se negara una condición que no se ajustaba propiamente a las condiciones de los animales, para, posteriormente, llevar a entender a los animales desde otra perspectiva, a saber, la de seres vivos o, incluso, la de seres sintientes, concepto que, dada su complejidad, explicamos de forma breve, refiriendo que se puede entender como un ser sintiente aquel que tiene la capacidad de sentir desde el plano físico, sensaciones como el placer o el dolor, y, según algunas definiciones, también desde el plano psicológico o emocional, emociones como la felicidad o tristeza.

Al respecto, y para denotar el auge que ha habido a nivel legal en el planeta de normas de protección animal que entienden a los animales ya no como cosas sino como seres vivos o seres sintientes, pueden ilustrarse muchísimos ejemplos, algunos de los cuales referimos en dicha ocasión, como lo son los casos de Austria, Suiza, Italia, España y Colombia, entre otros, y recordamos precisamente que, en nuestro país, los animales son considerados legalmente como seres sintientes.

Ahora bien ¿por qué quisimos ilustrar este punto en una charla que iba dedicada, principalmente, a empresarios? Pues bien, porque consideramos que en una sociedad en la que se pretenda respetar y buscar incluir a los animales como seres sintientes, se deben adaptar espacios que sean adecuados para la convivencia entre seres humanos y otros animales, y en ello juegan un papel muy importantes cafés, restaurantes, centros comerciales y otras empresas que tengan atención al público.

Asimismo, quisimos mostrarle a quienes estaban presentes en la charla, que el hecho de considerar a los animales que forman parte de familias multiespecie y abrirles espacios, puede no solo representar beneficios para estos animales y para los humanos con quienes ellos comparten o de cuyas familias hacen parte, sino que, además, puede representar una oportunidad de crecimiento de sus negocios, pues es cada vez más la gente que tiene un animal como parte de su familia, y en ese sentido, es cada vez más la gente que probablemente evitará acudir a un establecimiento de comercio al que no puedan entrar con un animal no humano. Todo esto, soportado con datos que muestran que la cantidad de familias que conviven con un animal en Colombia es muy alto (43% de las familias colombianas, en 2021) y que esta tendencia va en crecimiento exponencial, de modo que es un aspecto que difícilmente puede ignorarse.

 

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